Con gran gozo se efectuó recientemente la asamblea de mujeres metodistas del circuito Bayamo, evento que tuvo lugar en nuestro templo con la participación de más de centenar de valientes guerreras.
Con el lema “Me alisto para la victoria” se hizo un poderoso culto de apertura donde la fraternidad anfitriona lideró con danzas, coros de júbilo y adoraciones ministradas también por el grupo de alabanza local.
Tras un poderoso devocional trajo palabra de vida la pastora Bisela Bustamante, de la segunda iglesia metodista de Bayamo. Esta carismática mujer de Dios se basó en Proverbios 31, para hablar de las mujeres virtuosas, cuyas cualidades la hacen cercana a Dios, pero también puntal en su familia, en su congregación y en su entorno.
Durante la gloriosa asamblea la pastora Onllal Pérez, de la iglesia sede, desarrolló un taller sobre la familia. Qué hacer para convertirnos en verdadera ayuda idónea, de qué herramientas bíblicas valernos para ser una esposa y madre adecuada, cómo complacer al esposo en toda área del matrimonio; estas y otras interrogantes formaron parte del intercambio con las delegadas del circuito Bayamo.
Por su parte la pastora Mabel Rodríguez, de la iglesia de Nuevo Yao, reflexionó con las presente sobre los retos que nos impone la Cuba actual. Remitiéndose al capítulo 7 del libro de Ezequiel hizo una comparación entre la situación que vivía en aquel tiempo el pueblo de Israel y la actual de Cuba, encontrando paralelos en el pecado de antaño y el de nuestros tiempos.
Pese a la tendencia pecaminosa de toda una nación, dijo, tenemos un Dios poderoso y grande en misericordia que bendice a sus hijos fieles.
La predicadora final fue la pastora Mercedes Ruiz, presidenta nacional de la Fraternidad Metodista de Mujeres, quien habló sobre una mujer extraordinaria cuya historia se recoge en el décimo séptimo libro de la biblia: la reina Ester. Relacionando las diferentes actitudes de la prima del judío Mardoqueo, nos llevó a la reflexión sobre la dependencia de Dios en los momentos difíciles, la necesidad de no mirar atrás por difícil que sea la circunstancia, sino de ir adelante con Dios como escudo, y de confiar siempre porque, como bien dijo, “lo mejor está por venir”
Al cierre y después de un glorioso tiempo de adoración y alabanza se hizo un reconocimiento especial a todas las pastoras presentes y a las líderes de fraternidades, recompensando su excelente capacidad de liderazgo y su amor para hacer avanzar la obra de Dios en medio de las adversidades.
Las mujeres metodistas del circuito Bayamo se alistan cada día para la victoria.